Pensaba escribir, no sé, de las palomas, de la adicción al plástico de nuestra sociedad o de la "policía patriótica", insertada en nuestra democracia para dejarla hecha unos zorros. Tenía varios temas con tal de no hablar de las próximas elecciones. Pero he claudicado al ver y oír las arengas de algunos políticos, cargadas de mentiras e histrionismo, y se me ha hinchado la vena.
Votar verdad, es la forma más responsable y útil de actuar como ciudadano.
Ya la verdad ni importa ni se le espera, "pa qué". Con lo bien tolerado que está el contar mentiras. El arte de manipular se ha hecho valor, retorcer los hechos, las palabras y estrujar eufemismos, es la panacea. Así se nutren las "realidades paralelas", con sus palmeros encargados en dar por buena cualquier ocurrencia, cualquier patochada que diga el líder, ese que es de "los míos y dice verdades como puños". ¿Verdades como puños?, ja, pero si la mayoría de esas "verdades" sucumbe ante la prueba del algodón. Las hemerotecas apenas asoman, qué más da, si un político dice que su partido va a limpiar este país de la corrupción -de los otros, claro-, se le cree, aunque quien lo dice, sea el líder de un partido muy corrupto y sentenciado, pero la ovación se la lleva.
Otro, montado en su caballo nos habla de banderas y patria, de terminar con "chiringuitos políticos" o que la sanidad y la educación habrá que pagarla, se le ovaciona también, que para eso ya defiende la rojigualda y punto. Aunque ese jinete de la reconquista haya vivido del cuento político contratado por un "chiringuito" que le pagaba una pasta por no hacer nada, menudencias, se le aplaude y punto.
"Son los que vienen a 'salvarnos' a base de mentiras y engaños, lo que haga falta para que tu cerebro termine sin saber discernir"
Son los que vienen a "salvarnos" a base de mentiras y engaños, lo que haga falta para que tu cerebro termine sin saber discernir más allá de patria, unidad de España, bandera y propaganda, pero vas y los aplaudes. Que otro iluminado te cuenta que "los otros, los malos" aprueban leyes de aborto para después de nacer, ya te podría hacer sospechar sobre el nivel de ignorancia que te ofrecen, pero vas y les votas. "Aquí lo que importa, es ir en contra de los otros".
Pero te dejas en el camino lo más importante, la verdad, o lo que más se acerque a ella. Si no la buscas, eres carne de cañón para el engaño. Y buscarla no es difícil, es informarte, es leer los programas de los partidos y descubrir la "letra pequeña" que te puede hacer cómplice de tu pérdida de derechos y libertades. Si te tomas la molestia de leer los programas políticos, que sí, que muchas veces tampoco se cumplen, al menos podrás sacar tus conclusiones sobre cuáles son las distintas propuestas para el país. Ahora mismo, es la forma más responsable y útil de actuar como ciudadano. Dejarte llevar por los cantos de sirena -mejor dicho golpes de atril y gritos-, es aceptar una dimensión desconocida que a base de mentiras, se ha inventado una historia a tu medida para hacerte picar, para que les votes. Si metes la pata ahora, habrá que esperar cuatro años para enmendar la plana y, según quién o quienes cojan el mando, se nos puede hacer, se te puede hacer, muy largo. Haz un esfuerzo, infórmate y vota verdad, o lo más aproximado a ella. Machado escribió:
“¿Tu verdad?, no; la verdad. Y ven conmigo a buscarla. La tuya guárdatela.”