top of page
  • Foto del escritorMaskao Magacín

Los payasos del callejero

Es que te guste desde pequeño, que lo lleves dentro, que tú sientas la pasión por esa copla, por ese tipo de música, que la hagan suya, que la interioricen de tal manera que cuando tú la cantes, la cantes como un robot, que ya la cantas bien, la tienes dentro (Quique Valdivia).

Por Jaime Becerra


Luis Frade, director del coro y toda una personalidad del mundo del carnaval



El carnaval de Cádiz es alegría a raudales, color, ingenio, risas y mucha música resonando por las estrechas calles de la ciudad; una chirigota por aquí, una comparsa por allí que se entrecruzan con los ecos de un coro, un cuarteto o un romancero. Y aunque el carnaval explota en la calle a finales de febrero, el Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas (COAC) comenzó mucho tiempo antes en el Gran Teatro Falla, templo del carnaval donde cada año se elige la mejor chirigota, comparsa, coro y cuarteto. Un premio preciado y de gran prestigio.


El concurso del COAC y todo lo que le rodea, lleva marchamo oficial. Por eso, las agrupaciones que participan en el concurso oficial, se llaman oficiales. Y las que no lo hacen, asaltan las calles con espontaneidad y mucho amor al carnaval, alejadas de concursos pero consiguiendo otro premio, el aplauso de su público, de la calle. Son las agrupaciones callejeras.


Luis Frade observa el ensayo desde la perspectiva del público, compuesto por familiares

y amigos de los integrantes del coro



Ensayo del domingo, a principios de febrero y al mediodía en un Colegio Mayor frente al Parque Genovés. Es el coro callejero de Luis Frade que está "apretando" para llegar a punto a su cita con el Carnaval 2020, a finales de febrero. No podemos ver el tipo (disfraz) de este año porque sería como hacer un spoiler, el secreto se guarda celosamente hasta el 23 de febrero, cuando será revelado a nivel mundial.


Hoy vienen familiares y amigos al ensayo. Son como una fraternidad que vive el carnaval a tope, lo disfruta y se lo pasan bien, es una terapia fascinante. Pero sobre todo, es parte de Cádiz y de su gente, de su tradición y su cultura, el gaditano sin el carnaval no se entendería.


"Yo dije: vale, me comprometo a hacerlo pero nada más que para la calle, no venimos al teatro y por un año. Así empezamos ‘pa un año’ y ya llevamos 18"

El ensayo termina y Los payasos del callejero rompen filas, la mayoría se va con la familia y otros van al fútbol. Es un buen momento para hablar con Luis Frade, director del coro.


Es usted fundador de este coro callejero, ¿cuándo empieza?

En 2003 y de casualidad. Yo he sido director durante 18 años del primer coro mixto que hubo en Cádiz, mi mujer era la autora y dejamos de salir en el año 97. Después, durante dos años sacamos una chirigota callejera. Pero estando un día en el Teatro, porque me había nombrado el Diario de Cádiz presidente del jurado del diario, y estábamos en una noche de estas tediosas del Falla, muy aburridos y alguien dijo: "Quillo, por qué no sacamos un coro". Y yo dije, vale, yo me comprometo a hacerlo pero nada más que para la calle, no venimos al teatro y por un año. Así empezó. "Pa un año" y resulta que llevamos 18.


El director del coro, durante un ensayo a principios de febrero pasado



Es usted una institución en el carnaval.

Bueno, la verdad es que soy bastante conocido, no solo por este coro, sobre todo por el primero, cuando mi mujer Adela y yo, fuimos los creadores del coro donde por primera vez la mujer se incorpora al mundo del carnaval y claro, eso... Conseguimos un buen coro, conseguimos primeros premios, conseguimos segundos premios y se nos dio un nombre.


La mujer en el coro fue un riesgo.

Sí, eso fue hace ya 40 años cuando era impensable que la mujer cantara con los hombres. Es más, tuvimos nuestros más y nuestros menos muchísimo tiempo. "Que qué hacen aquí las mujeres, las mujeres tienen que estar en su casa", era lo más suave.

Pero conseguimos superar eso, conseguimos premios y muchas otras cosas bonitas.


¿Qué es ser director de un coro?

Sobre todo, tener un poco de carisma para unificar a la gente. Mi función no es precisamente afinar el coro. En el coro mixto era Adela la que hacía la música y se ponía delante del coro como directora musical. Aquí, durante estos años, está Quique Valdivia que lo hace muy bien. Creo que cada uno, en donde esté, sea en carnaval o lo que sea, se debe limitar a lo que sabe. Yo lo que sé hacer bien es aglutinar a la gente, llevar a la gente "pa alante", mano izquierda por aquí, mano derecha por aquí, y bueno, eso es.



"Nunca le pongo límite, pero claro, debería ponerlo, porque normalmente los coros son 45 personas y yo tengo en este coro 65"


¿Se hace algún tipo de selección para entrar al coro?

Cuando sacamos el coro para el teatro, para concursar, pues ahí sí porque estás concursando y quieres ganar un premio. Aunque nosotros, en nuestro coro primitivo, éramos parejas de chavales muy jóvenes, con nuestras novias, nuestras mujeres, pero conforme íbamos creciendo, empezamos a seleccionar a la gente para que entraran algunos que cantasen mejor que nosotros. Pero aquí en este coro, no.

En este coro, todo el que llega, si tiene más o menos amistad conmigo, lo conozco y sé que es un buen tío, pues casi seguro que tiene entrada. Nunca le pongo límite, pero claro, debería ponerle límite, porque normalmente los coros son 45 personas y yo tengo en este coro 65. Y seamos callejeros o no, la batea (remolque) tiene una capacidad que es de más o menos 60. Con nosotros viene un chaval en silla de ruedas y no puede subir a la batea, pues lo que hacemos, los que no caben, que no es que sean siempre los mismos, van subiendo y bajando acompañando al que está en silla de ruedas. Pero ya el límite lo tengo que poner en 65, ya más es imposible. Aquí el problema es que la gente entra con mucha ilusión y nadie se quiere ir.


Este carnaval, el título es "Los payasos del callejero"

Ese título es porque resulta que hay mucha gente que sale en otros coros, llamémosle punteros del Carnaval de Cádiz, que muchas veces nos han visto y han hecho un comentario despectivo diciendo: "ah, esta gente son los payasos del callejero". Y ese título nos gusto y lo hemos cogido. No quiere decir, que vayamos en contra de la gente que habla de eso. El título nos gustó y a partir de ahí hicimos el coro.


"El coro que va al teatro ensaya toda la semana, y nosotros, dos veces por semana, esa es la gran diferencia"

¿Callejero es lo mismo que ilegal?

En el Carnaval de Cádiz, hace unos 40 años, a la calle no salía nadie, ni disfrazado ni nada. La gente salía a escuchar las agrupaciones, más bien, iban detrás de ellas. Pero afortunadamente desde que empezamos a salir con el coro mixto y las mujeres se incorporaron también a la calle, entonces, el boom de la calle ya es tan importante, que ilegal no, ya es un carnaval de calle.


Este coro tiene buen pedigrí... el Presidente del Cádiz Club de Fútbol, médicos, notarios, cirujanos, economistas...

Llevo metido en el mundo del carnaval ya más de cuarenta años y eso me ha dado el conocer a muchísima gente que le gusta el carnaval, pero por su posición o sus trabajos, la mayoría no pueden dedicarse diariamente lo que exige un coro que va al teatro.


Como aquí saben que ensayamos dos días, muchos me dicen: "Quillo Luis, yo quiero salir en tu coro". Entonces, van entrando, van entrando... Y este es un coro muy diversificado, aquí hay un notario, un jefe de cirugía de un hospital, como hay un chaval que está repartiendo muebles, que hay de todo, nos llevamos bien y todo el mundo estamos encantados.


¿Todo un año preparando el coro?

No, este año no. En el otro sí estuvimos todo el año preparándonos. Pero en este, nos reunimos a partir de septiembre y empezamos a ensayar dos días a la semana.


Los Payasos del Callejero, un coro muy variado en profesiones, oficios y edades.



¿El tipo lo encargáis o lo hacéis vosotros?

No, no, el tipo normalmente lo hacemos nosotros, comprando cosas por Internet. Si fuéramos al teatro, lo encargaríamos seguramente. Pero lo hacemos nosotros. Tenemos una chica que es la mujer de uno de nuestros componentes, estudió bellas artes y es diseñadora, nos pinta si hay que pintar algo, nos hace, si hay que hacer algo. Así no nos sale tan caro.


¿Y cómo se financia esta puesta en escena?

Nosotros lo que hacemos es, llamémosle, pagar una cuota de más o menos doscientos euros cada uno. Y después tenemos una subvención del Ayuntamiento por salir a la calle con la batea, después los anuncios que buscamos, los Cd que vendemos, los libretos... Normalmente solemos tener un presupuesto de unos 20 o 30 mil euros, pero siempre hemos sido un coro que hemos mirado muy bien por el dinero y siempre nos sale bien. Nos sobra incluso para hacer una fiesta o irnos de viaje.


¿Qué es un coro callejero?

Lo mismo que un coro del Teatro, lo único que pasa, es que no vamos al teatro pero estamos en la calle. Y al no ir al teatro, ensayamos menos y no llevamos popurrí. En lo que más se tarda en un coro que va al teatro, es en los popurrí, son ocho minutos, son muchas músicas distintas y eso te da mucho trabajo. Nosotros llevamos un popurrí de estribillos nuestros de todos los años. Lo único que hacemos cada año es incorporarle el del año anterior. Eso no nos lleva mucho tiempo, ensayamos dos veces por semana.

El coro que va al teatro ensaya toda la semana, esa es la gran diferencia entre el coro callejero y el coro que va a concurso. Después en la calle todos sonamos igual, más o menos. Porque en la calle no se canta popurrí prácticamente nunca, en la batea se cantan tangos y cuplés que es lo que hacemos nosotros.


¿Mejor la calle que El Falla?

Cuando participaba en el Falla decía, no salgo en carnaval. Pero cuando probé la calle... Cuando tú estás metido en el concurso, competir, ser el mejor... Pero cuando tú te vas a la calle y ves como lo pasas; la calle dices tú, es lo primero. Porque para mí la calle ahora mismo, es lo primero.


Aprovechamos la ocasión y hablamos también con Quique Valdivia, Director musical, letra y música del coro.


Quique Valdivia, director musical del coro



¿Desde cuándo andas liado con la música y los carnavales?

Con este año hago 41 ya, y haciendo letra y música del coro, 5.


¿Recuerdas cuándo empiezas con los carnavales?

Entro a los carnavales por Paco Alba, con los Belloteros en 1975. Todavía no había cumplido los 12 años, los vi, me encandiló y me fui detrás de ellos. Me perdí, y mi hermano, mi madre y mi padre buscándome. No tenía reloj, eran las 6 y pico de la tarde y todo el mundo buscándome, se me había olvidado almorzar y todo. Me aprendí todas las letras del repertorio, anteriormente había escuchado a Antonio Martín, chirigotas de Juan Ponce. Pero la música desde siempre me ha gustado, sobre todo, la de carnaval.


¿En qué te inspiras para componer?

Me surge la idea, la comento con el tío del lápiz, Luis Frade, y si terminamos en febrero, en marzo o abril nos sentamos a desayunar juntos, dándole vueltas a las ideas hasta que damos con una y ya tiramos para adelante. Yo hago letra, música y las ideas.

Luego un grupo se encarga de hacer el disfraz, el tipo. Y le vamos dando vueltas al título, eso sí, el título hay veces que se me ha cambiado. Este año no, pero hay otros que lo hemos cambiado, porque encontramos uno más apropiado.


"Y tienen muy poca memoria. Yo corrijo algo y a los 5 minutos lo están haciendo mal otra vez"

¿Lo más complejo, a nivel musical, en un coro?

Para este coro en particular, el ritmo, es muy complicado. Es un coro acostumbrado a cantar a su aire, no lleva una disciplina en los ensayos, entonces mantener el ritmo es complicado.

Y tienen muy poca memoria. Yo corrijo algo y a los 5 minutos lo están haciendo mal otra vez. Pero es la idiosincrasia de este coro, ensayamos muy poco y hay gente que no tiene el ADN de carnaval. De los 65 que somos este año, habrá 15 o 18 con ADN de carnaval, el resto, vienen aquí por el cachondeo, porque se lo pasan muy bien, pero no tienen ese ADN de carnaval. A mí, lo que más me gusta, es el ensayo. A ellos no, a ellos lo que más le gusta es la calle porque salen para eso, para el cachondeo.


¿Y qué es el ADN del carnaval?

Que te guste desde pequeño, que lo lleves dentro, que tú sientas la pasión por esa copla, por ese tipo de música, que la hagan suya, que la interioricen de tal manera que cuando tú la cantes, la cantes como un robot, que ya la cantas bien, la tienes dentro, haces el quejío dónde hay que hacerlo, haces el piano donde hay que hacerlo y eso es lo que se llama ADN de carnaval. Yo me llevo todo el año escuchando carnaval, incluso el jueves santo.


¿Cómo van las voces?

Tenemos la cuerda de tenores, una cuerda de segunda, la cuerda de bajos. Dentro de los tenores, hay 4-5 que tienen la voz un poquito más destacada, que es donde le metemos ya las octavas, octavillas que decimos en Cádiz o en algún caso concreto un contralto, pero normalmente en este coro no llevamos, siempre hacemos una octavilla. Es igual que cualquier otro coro, llevamos la misma distribución en voces pero, ensayamos la cuarta parte de un coro que va a concurso, con lo cual, hacer sonar este coro es casi un milagro y lo vamos consiguiendo año tras año. Luego los dos días que ensayamos, uno viene un día, el otro día no viene, luego la semana que viene... es complicado.


La orquesta cuenta con cuatro guitarras, dos laudes, dos bandurrias y un bajo eléctrico



¿Qué instrumentos lleváis?

Cuatro guitarras, un bajo eléctrico, dos bandurrias y dos laudes. Tenemos a dos que prácticamente llevan la voz cantante ahí, Rafa Martín y Eduardo, son los que se encargan de ensayar con la orquesta aparte, mientras yo me quedo con las voces, son los que se encargan de darle ritmo, de hacer las falsetas, que esas las hace Rafa Martín, y las introducciones.


Manuel Cotorruelo es notario y uno de los integrantes del coro.


¿Cuántos años en el coro?

Este es el séptimo que salgo.


Manuel Cotorruelo lleva siete años en el coro



¿Tenías relación con el carnaval?

De joven, casi todos los que somos de Cádiz, hemos salido en alguna agrupación. Con mi familia, con amigos, habré salido 4-5 años, después me fui fuera a estudiar entonces lo dejamos.


¿Instrumento o solo cantas?

Canto y a lo justo.


¿Cuándo se os podrá ver?

El sábado 23 de febrero a las 12:00 h ya estamos en la calle.


¿El coro es parte de tu vida?

Cuando entras en una agrupación, el carnaval lo vives de manera diferente, se te mete un gusanillo que es muy difícil de quitar. También es sacrificado, ensayamos durante meses y salvo que ocurra algo que te impida ese ensayo, haces lo posible por estar, porque vives el carnaval desde este lado y te gusta mucho más que estar fuera de cualquier agrupación.


Guillermo Boto es economista y gestor hospitalario, trabaja en un hospital de la ciudad y es integrante del coro.


Guillermo Boto, integrante del coro



¿Désde cuándo en el carnaval?

Mis primeros recuerdos son de niño. Con siete u ocho años mi padre me llevaba a la Plaza de Abastos, siempre nos reuníamos con la familia en el mítico bar El Merodio. Allí, sobre los hombros de mi padre, escuchaba los pocos coros que salían en esos años: La guillotina, Los liberales, Los Buhoneros. Salían en carrozas (ahora son bateas). Aún conservo las cintas de casete que mi padre compraba y he heredado en vida, sigo poniéndolas en mi viejo equipo que tengo en la cocina.


¿Cuándo entras al coro?

El año 2009. Coro Los piratas del Cadi Be. Ese año también tuve la suerte de ser jurado del Diario de Cádiz en el COAC. Y anteriormente salí 5 o 6 años en una chirigota callejera con mis amigos de toda la vida.


¿Instrumento o solo voz?

Solo voz.

Canto en la cuerda de segunda.


¿Por qué en un coro callejero y no en uno del concurso oficial?

Ser "callejero" es toda una filosofía. El Carnaval de la calle es muy auténtico. Ofrecer una actuación en la calle a cambio de una sonrisa o un aplauso no tiene precio.


El pasado carnaval, el coro se presentó bajo el título: "En Cadi hay que Maorí"

Fotos Eduardo Gómez Olano



¿Qué tal los ensayos?

El nivel actual del concurso exige a las agrupaciones a ensayar repertorio, su música, nuevas letras, coreografía, de una forma muy intensa. Además de confeccionar un disfraz (tipo) y un forillo para el teatro que requiere mucho esfuerzo. Pero la calle no exige tantos requisitos y nuestros ensayos no son tan intensos. Comenzamos a finales de septiembre para conjuntar la voz de 60 o 65 personas con nuevas músicas y letras, eso requiere su trabajo.


Con menos ensayos que los "coros oficiales", ¿hay mucha diferencia?

Ni mucho menos. Quizás instrumental o vocalmente no seremos de los mejores, pero haciendo reír y disfrutar a los aficionados, somos los números uno.


"Ser callejero es toda una filosofía. El carnaval de la calle es muy auténtico"

¿Ilegales, callejeras, oficiales... ?

Las oficiales son las agrupaciones que se presentan al COAC. Las agrupaciones callejeras o ilegales somos las que sólo vamos a cantar en la calle. Ya lo decimos en una letra de tango:


Mi coro no es de concurso

Mi coro canta en la calle

Mi coro es que pertenece

A esa banda que llaman ilegales

Mi coro no es orgulloso

Tampoco de los punteros

Mi coro solo pregunta donde se canta

Y ahí está el primero


¿El coro es una forma de vida?

Sí. El coro no deja de ser una familia. Es la válvula de escape del día a día. Después de un día de trabajo llegas a ensayar cansado y con ganas de haberte quedado en el sofá. En 5 minutos te estás riendo y disfrutando de la música y de la amistad. Es una forma de disfrutar del Carnaval desde el otro lado. Una forma de aglutinar a tus amigos y familiares a tu alrededor. Es vivir con una sonrisa y la banda sonora de tu propia vida o

188 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Yorumlar


bottom of page